Crítica de la película 'Blue Caprice'

Blue Caprice

Un niño abandonado es traído a América y arrastrado a la sombra de una figura paterna peligrosa. Inspirado por los hechos reales que llevaron a los ataques del francotirador de Beltway 2002.

Duración: 1hr. 33 min.
País: Estados Unidos
Director: Alexandre Moors
Guion: R.F.I. Porto
Reparto: Isaiah Washington, Tequan Richmond, Tim Blake Nelson, Joey Lauren Adams,

Crítica de la película 


Viniendo sorpresivamente de la nada desde el Festival de Cine de Sundance, Blue Caprice, es un drama independiente atemorizante, realista, cruel, complejamente psicológico; es de esos que te dejan pensando en una chocante temática “Grand Theft Auto” en lugar de entretener. 

Y no hay forma de que esta película entretenga con la confortable seriedad que muestra. Basado en hechos reales sobre los ataques de los francotiradores de Beltway, Washington en 2002, el filme muestra cómo el mal es el axioma que enferma las mentes de los antisociales en nuestra sociedad, y aunque los personajes principales no hayan sido clasificados como psicópatas, la evidencia en cada una de las escenas demuestra que sí lo eran.

Todo comienza en medio de la desolada vida de pobreza de un suburbio en Antigua, donde el joven, Lee Boyd Malvo (Tequan Richmond), conoce a John Mohammed (Isaiah Washington). Ambos tienen un pasado traumático, oscuro, que inquieta sus mentes, pero ellos lo disimulan y se unen en una relación padre-hijo. Un día, cuando arriban en la ciudad de Washington, sus vidas parecen más paupérrimas de lo que eran, y al sucederle esto, comienza la cacería inescrupulosa de matar personas al azar sin razón alguna. Pero, ¿había alguna razón?

Sí, es lo que digo. Todo el punto de la película se resume en su comportamiento antagonista. Con el típico: ¿Por qué cometieron los asesinatos? ¿Por qué víctimas al azar? Y más que nada, ¿cuál era la razón?

Para responder a esas preguntas, solo hay tres palabras que puedo usar para describir el subtexto: venganza, resentimiento, violencia. Hay ciertas escenas en Blue Caprice, que describen el incomprensible mal que surge dentro del pensamiento de una sociedad desmoralizada por la degradación política; como si fuera un apocalipsis maligno que carcome la mente inconscientemente.

Y para llegar a ese punto, los actores principales se lucen. Los mejores momentos están en los diálogos y las actuaciones. Isaiah Washington, como John Mohammed, es una persona mentalmente inestable (como Travis Bickle) afectado por la separación de sus hijos, victimado por la pobreza y las normas sociales; su rostro y su forma de expresarse lo dice todo. Aunque en la contraparte la actuación de Tequan Richmond como Lee Malvo, es digna de admirar; él no habla mucho, es un chico introspectivo, pero así como un volcán de resentimiento a punto de hacer erupción, sus expresiones y forma de actuar reflejan la condición psicológica que padece. Está lleno de odio.

Para enfatizar esas emociones, siempre está nublado, bajo una atmósfera tensa y oscura; como si se dirigiesen al valle de la muerte. El propósito es reflejar la inestabilidad psicológica de los personajes para tener una idea de qué tan perturbada están sus mentes. Por eso se nota el filtro de color gris en casi todas las escenas. Más aun, porque pudieron tener un pasado turbulento que hace que actúen de esa forma.

Sin ser pretencioso, Alexandre Moors se las juega en su debut como director, mostrando la otra cara de la moneda, es decir, la perspectiva y el modus operandi de los criminales. Presenta un retrato devastador de cómo una mente resentida puede causar una histeria colectiva masiva. Su objetivo es una sociedad nihilista llena caos; o así como Mohammed dijo: "queremos mantenerlos asustados. Que permanezcan asustados... Caos total. El sistema se derrumba".

Si nos ponemos a pensar detenidamente, eso es lo que sucede a diario en los Estados Unidos, y Blue Caprice es una crítica estremecedora de ese decadente sistema social. Nos dice que esas personas no eligen ese tipo de vida, sino que, el envilecimiento cívico del pueblo es que los lleva a ser antisociales, comprar un rifle de asalto y matar a personas inocentes. Y claro que, hay una explicación para esos hechos silenciosos, pero en el mundo del thriller de ficción los asuntos humanos son difíciles de explicar con una sola voz.

7/10




1 comentario:

  1. Muy buenas sus reseñas, echenle un ojo a las mías :) http://ordoreviews.wordpress.com/2013/11/09/review-thor-un-mundo-oscuro/

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