Crítica de la película «Retratos de familia» (2013)

Ilo Ilo
Retratos de familia, conocida con el título original de Ilo Ilo, es una película singapurense que supone la ópera prima del joven cineasta Anthony Chen. En el momento de su estreno fue galardonada con la Caméra d'Or, convirtiéndose de inmediato en la primera de ese país asiático en ganar un premio en el Festival de Cine de Cannes. No es que se trate de algo fuera de serie ni mucho menos, pero habiéndola visto ahora, considero que su galardón está más que justificado porque todo lo que veo en ella me hace pasar un rato bien agradable durante una hora y media. Con un sentido de sutileza, Chen sintetiza un retrato muy conmovedor de una familia singapurense que, en su núcleo de intimismo, dialoga sobre la crisis económica y la interculturalidad de un país en transición hacia la prosperidad globalizada, con un enfoque dramático que pocas veces abandona su horizonte de consistencia esbozando las peripecias intrafamiliares de los personajes. Su trama se sitúa durante la crisis financiera asiática de 1997 y sigue el rastro de la familia Lim cuando contrata a una empleada doméstica de origen filipino llamada Teresa (cuyo apodo es Terry), que en su condición de inmigrante busca una mejor calidad de vida. El arranque me resulta ameno por la manera en que ilustra, con un poco de comicidad, las responsabilidades de la sirvienta cuando cuida al niño travieso, Jiale, que siempre se mete en problemas en la escuela y tiene un comportamiento malcriado mientras los padres están trabajando. Pero luego me invita a razonar desde las escenas que amplifican los dilemas familiares, primero, cuando el padre, Teck, es despedido de su empleo en el departamento en ventas de una empresa de vidrio y, segundo, cuando la madre embarazada, Hwee Leng, es víctima de una ansiedad engendrada por la reducción de personal en la naviera para la que trabaja como secretaria. La crisis familiar traza un cuadro de circunstancias que muestra, en mayor o menor medida, la pérdida de la inocencia del niño en su camino a la disciplina escolar, los prejuicios a los que se expone la criada tolerante, la rigidez de la madre embarazada que siempre cuestiona la integridad moral de la extranjera, y la frustración del padre que fuma cigarrillos para ocultar la dura decepción ocasionada por su trabajo temporal como guardia de seguridad en una granja de huevos. Este escenario me parece bastante creíble por la forma en que Chen, alejado de golpes bajos y de episodios melodramáticos, esquematiza lentamente la desesperación de una familia que atraviesa una cotidianidad difícil provocada, ante todo, por la incertidumbre económica que se manifiesta a través del desempleo que lacera la dignidad humana, pero cuyo discurso, en su interior, alcanza una mayor cuota de solidez al mostrar también el interculturalismo como un pilar fundamental para el desarrollo económico que trae la globalización, subrayado, sutilmente, por el vínculo maternofilial que se desarrolla entre la inmigrante filipina y el niño singapurense. Su puesta en escena posee, asimismo, unos cuantos valores estéticos que acentúan la desdicha de la familia con el uso prolongado del primer plano, el plano medio, el sonido diegético interno-subjetivo y la solvencia del encuadre móvil de una cámara en mano que dimensiona las inquietudes más inmediatas de los personajes. El registro es bastante orgánico con las actuaciones de Yeo Yann Yann, Chen Tian Wen, Angeli Bayani y Koh Jia Her. Con ellos, adopta un estilo atiborrado de ternura, compasión, humanidad, similar a lo que se encuentra en la emotiva Yi Yi (Yang, 2000). Y nunca pierde su ritmo. El plano final, que presenta el breve parto del bebé, no lo voy a olvidar en mucho tiempo porque, dicho sea de paso, no solo refleja la esperanza de la familia, sino, además, el enorme sacrificio de un país que, dentro de sus marcos limítrofes, entregó todo para ver el nacimiento del bienestar socioeconómico.

Ficha técnica
Título original: Ilo Ilo (IloIlo)
Año: 2013
Duración: 1 hr. 39 min.
País: Singapur
Director: Anthony Chen
Guion: Anthony Chen
Música: 
Fotografía: Benoit Soler
Reparto: Yeo Yann Yann, Chen Tian Wen, Angeli Bayani, Koh Jia Her
Calificación: 7/10

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